Un gato de piso no puede ser atropellado por un coche, o ser agredido, y tampoco puede pelearse. Los gatos de exterior son propensos a parásitos y están expuestos a agentes patógenos. La toma regular de fármacos puede fracasar debido al espíritu independiente de que si sospechan algo malo pueden desaparecer durante un largo tiempo. Sin embargo, los gatos de exterior sabemos que pueden disfrutar de un entorno mayor y más variado. A gatos independientes y curiosos les suele resultar más interesante el salir al campo o a un jardín en vez de un juguete nuevo dentro de casa. Por este motivo es importante que los gatos de piso tengan la posibilidad de trepar, moverse y ocupar el tiempo en algo interesante para evitar el aburrimiento. Aunque la mayor parte del tiempo lo pasa durmiendo, el resto del día se mantiene activo: acechando ante una ratonera o inspeccionando su territorio.
Lo que todo el mundo se pregunta alguna vez es si un gato casero que ve todos los días lo mismo es igual de feliz que un gato de exterior que ``tiene todo el mundo a sus patas´´. Cuando tomes una decisión ten en cuenta el ambiente:
- Calles con mucho transito.
- Gran cantidad de gatos en el
vecindario.
- Posibilidad de entrar y salir cuando
quiera.
- Si siempre a vivido en un interior y
nunca a salido al exterior no lo puede echar de menos.
- Si ha salido desde joven a la calle es casi imposible acostumbrarle a que deje de hacerlo.
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